Retenedor muy robusto, pensado para puertas muy pesadas y de grandes dimensiones.

Para instalación en puertas macizas.

Fabricado en aleación de zamak.

Fijación con tornillos (incluídos).

Retener y mantener una puerta abierta.

Evitar portazos imprevistos.

Colocar el retenedor en la posición deseada y marcar con un lápiz el mecanismo retenedor apoyandolo en la puerta.

Coger el imán circular y hacerlo encajar en la marca antes indicada.

Atornillarlo a la puerta.

Colocar de nuevo el retenedor en la posición deseada y marcar con un lápiz la posición de los agujeros de fijación.

Con una broca de Ø5mm, hacer los agujeros marcados previamente.

Atornillar el retenedor en la posición deseada.

Se recomienda colocar el retenedor lo más alejado posible de las visagras de la puerta para evitar el efecto palanca.

Se recomienda hacer los agujeros de fijación del suelo en la junta entre dos baldosas a ser posible, para evitar que está quede marcada y para que en el caso de retirar el tope se pueda tapar el agujero facilmente.